
#NoEntiendenLoQueLeen: los números detrás de la campaña que visibiliza la falta de comprensión lectora en alumnos de primaria
Las últimas evaluaciones Aprender y los análisis que organizaciones realizan en torno a la educación adelantaron cifras negativamente llamativas en materias troncales del programa educativo. Ahora, alrededor de 100 organizaciones de la sociedad civil participan de la campaña #NoEntiendenLoQueLeen, mediante la cual visibilizan la falta de comprensión lectora en alumnos de nivel primario.
En año de elecciones la educación se transforma en un tema central de debate y discusión que interpela transversalmente a gran parte del arco social. La campaña #NoEntiendenLoQueLeen, integrada por más de 100 organizaciones de la sociedad civil y basada en datos del Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE), visibiliza una problemática latente con respecto a la comprensión lectora en alumnos de nivel primario de todo el país y compara los porcentajes con el resto de la región.
La narrativa de la campaña tiene cimientos en un dato preocupante: el 46% de los alumnos argentinos de tercer grado no alcanzan el nivel mínimo de lectura. Además de dar a conocer la situación por la que atraviesa el sistema escolar, la iniciativa tiene como objetivo promover la prioridad de la alfabetización en la agenda educativa.
“La campaña busca que los ciudadanos contribuyan a generar concientización sobre el tema. Se solicita al Presidente y a los candidatos a presidente que desarrollen un plan para priorizar las políticas de alfabetización, incluyendo el apoyo técnico a las provincias y la transferencia de recursos, además de la implementación periódica de Pruebas Aprender en 3er grado”, detallan en el informe publicado mientras que interpelan también a los gobernadores en ejercicio y electos a que “se comprometan para lograr que todos los estudiantes terminen tercer grado comprendiendo lo que leen”.
Si bien la comprensión lectora se presenta como una dificultad entre una parte importante del universo de alumnos de primaria, hay una brecha relacionada al nivel socioeconómico. El 48% mencionado anteriormente, explican desde la ONG, asciende a 61,5% entre los estudiantes del tercil de menor nivel socioeconómico, y desciende al 26,3% entre los estudiantes del tercil de mayor nivel socioeconómico.
Los datos sobre los que se sustenta la campaña nacen a partir de la prueba regional ERCE realizada en 2019, en la que participaron 16 países de América Latina. En Argentina, sólo 1 de cada 10 alumnos (14%) se ubica en el nivel de desempeño más alto en lectura. Para la región, el promedio es 2 de cada 10 alumnos en ese nivel.
“Al observar la evolución de los resultados de lectura de 3er grado entre 2013 y 2019, Argentina presenta una de las mayores caídas de la región (-2%), superada solo por Guatemala (-3,2%). Apenas 6 países lograron mantener o mejorar su posición entre 2013 y 2019. Los mayores avances se registraron en el puntaje promedio de los estudiantes de Brasil (+5,1%) y Perú (+4,7%).Si se compara los resultados de lectura de los 13 países que participaron en las pruebas de 2006, 2013 y 2019, Argentina ha ido perdiendo posiciones”, concluyen en el informe.
Así retrocedió Argentina en el ranking de compresión lectora según el paso de los años
- 2006: Argentina ocupaba el quinto lugar (era superada por Costa Rica, México, Uruguay y Colombia)
- 2013: el país descendió al séptimo lugar y fue superado por Brasil y Perú.
- 2019: se ubicó en el octavo puesto, detrás de Ecuador.
Entra la IA y el #NoEntiendenLoQueLeen
El nivel de desigualdad educativa ha crecido en los últimos años tanto a escala regional como entre diferentes sectores socioeconómicos. Mientras desde una perspectiva es necesario activar campañas del estilo de #NoEntiendenLoQueLeen para visibilizar problemáticas que afectan el nivel de aprendizaje de los alumnos, en paralelo se debate la incorporación de nuevas plataformas al aula que demandarán un mayor desarrollo tecnológico por parte de alumnos y docentes.
¿Cuál es el punto de inflexión entre ambas cuestiones? ¿Son excluyentes entre sí? La respuesta a estas preguntas habilita un debate. Por un lado, la inteligencia artificial y la tecnología son herramientas claves y necesarias de incorporar en el ámbito académico con el fin de prepararse para las exigencias del mercado laboral de cara al futuro, pero parece un panorama algo utópico si al mirar los datos un 46% de alumnos de tercer grado tiene presenta dificultades relacionadas con la comprensión de textos. Ambos modelos deberán buscar el modo de formar un programa híbrido que acorte la brecha existente en este aspecto.