Último viernes del año: cómo hacer un balance del 2022 y definir metas para el próximo año
El balance educativo forma parte del checklist de cada diciembre. Tanto para instituciones escolares, educadores y alumnos, el análisis es importante para reparar en cuáles fueron los objetivos que se cumplieron, cuáles aquellas metas para las que faltó un poco y los puntos a modificar de cara al próximo año.
Falta un día para que termine el 2022 y el balance es casi un deber que nos permite entender cuáles fueron las metas que se alcanzaron, repasar aquellos objetivos que no se cumplieron y renovar los deseos para el próximo año. Al igual que sucede con las metas y las evaluaciones personales, en el ámbito educativo también es importante revisar a conciencia los resultados obtenidos.
Cada vez que arranca un nuevo año son necesarias las proyecciones: serán el mapa para conocer desde los datos cuánto se logró lo propuesto el año anterior y cuáles son los puntos a mejorar. Dentro del ámbito educativo, tanto para las instituciones como los docentes y los alumnos se recomienda chequear el cronograma anual para analizar los puntos fuertes y los aspectos que se deben seguir trabajando con el fin de mejorar la calidad del producto que se ofrece.
Para comenzar con el balance es fundamental tener en cuenta que lo importante es realizarlo de manera consciente, es decir: intentando dejar de lado los sentimientos como el ego o la presión de ser perfectos en todos lados todo el tiempo. Mirarlo desde esta perspectiva nos ayudará a enfocarnos en comprender aquellos points en los que nos destacamos, pero también en aquellos en los que aún falta ahondar.
Ningún resultado que otorgue el balance debería generar desmotivación o angustia. Todo lo que se evalúa es en pos de mejorar y plantear objetivos realizables a corto plazo (que se puedan revisar tras 12 meses). Ser profesional también es conocer en dónde están las fallas. ¡Si todo está siempre perfecto nunca tenemos nada para mejorar!
En conjunto con los objetivos, es clave aprovechar los últimos días (o en este caso las últimas horas) para escucharnos a nosotros mismos. Entender si lo que conseguimos, aunque hayamos cumplido con nuestros objetivos, va en línea con lo que queremos para el futuro, preguntarnos si por lo que estamos trabajando hoy nos llevará al lugar donde queremos estar mañana.
#ROBtips para armar un balance educativo de año:
- Definir si todos los conocimientos fueron adquiridos / presentados tal como lo indica el cronograma.
- Detallar cuáles fueron los puntos flojos durante el año: aquellas cosas que costaron más. Tomarse algunos minutos para detectar dónde estuvo la equivocación y proponer un plan de acción.
- Armar una lista enumerando los objetivos que sí se cumplieron.
Para finalizar, desde ROB Consultora les queremos agradecer por otro año compartido. Les auguramos un buen cierre del 2022 y los mejores deseos para el 2023, entendiendo que con amor, trabajo, pasión y dedicación todos nuestros objetivos y sueños se pueden alcanzar